martes, 18 de junio de 2013

Querido blog:
Pedro fue rápido y antes de que Esther pudiera decir nada la roció con un spray de pimienta y cerró la puerta.
-¡Silvia, ayúdame!-gritó Esther.
-Calla que te mato, bruja-contestó muy enfadado Pedro.
-¿Qué está pasando aquí?
Silvia acababa de llegar y estaba un poco aturdida al ver ese panorama. Al darse cuenta de la presencia de Silvia, Pedro tapó la boca de Esther y las manos y los pies con una cuerda que llevaba en un bolsillo de la chaqueta. Cogió a Silvia que ni siquiera tuvo tiempo de poder hacer algún gesto de defensa y las subió al sótano.
¡Ding,dong! Sonó el timbre. Pedro se asustó ya que con eso no había contado. Se puso a pensar en quién podría ser. Por un lado, la policía, ya que alguien le podría haber visto entrar en la casa y haberles avisado.
Por otro lado podría ser uno de sus ayudantes, que había rastreado su móvil con el gps que todos tenían instalado y, al ver que estaba en casa de sus enemigas, se había olido algo raro y había ido a ayudarle. Y por otro, Benji. Ante esa opción, Pedro se apresuró a bajar hacia la puerta y mirar por la rejilla.
Efectivamente. Benji.
"¡Mierda!"-Pensó Pedro- "¿Y ahora qué hago?" Pedro se había hecho un lío.
Pero, ¿Benji no se había quedado en la nave? Madre del amor hermoso, hasta Pedro se había perdido en esta historia.
Dani estaba encantado con ese libro. Cuando se despertaba y cuando se acostaba. Por la mañana y por la tarde. A todas horas leía ese libro.
Benji se temió lo peor. La policía le había avisado de que Pedro se había escapado y al ver que Esther y Silvia estaban solas en casa fue a supervisarlas. Se asustó ya que la puerta seguía sin abrirse aunque sin embargo notaba como constantemente la rejilla se abría y se cerraba. Se sentía observado. Pegó una patada a la puerta que dejó al aturdido Pedro tirado en el suelo medio desmayado. Benji no tardó en reaccionar. Se tiró sobre él y empezó a pegarle puñetazos. Ya se estaba empezando a cansar de esa historia y cuando dejó a Pedro medio muerto en el suelo le empezó a rebuscar en sus bolsillos. Encontró el spray de pimienta y no lo dudó ni un segundo, se lo echó en los ojos. Empezó a buscar a las chicas por toda la casa hasta que lego al sótano. Se le cayeron las lágrimas cuando la desamordazada Silvia se fundió en un abrazo con él.
Llamaron a la policía y Pedro fue arrestrado por última vez. Silvia y Benji acabaron juntos y nadie volvió a separarles nunca más.

jueves, 13 de junio de 2013

Benji estaba muy nervioso, sabía que las cosas no iban a ir a mejor y que todo esto acabaría mal. Pedro ordenó al piloto que aterrizara en el próximo aeropuerto. Él, como no quería llevarse un tiro en la cabeza, lo hizo. Mientras tanto, en la cocina, estaban Benji y Pedro. El "compinche" de Pedro, de repente, le apunta a Pedro en la cabeza diciéndole que suelte al chico y lo deje ir. Pedro, atónito, como persona razonable, soltó a Benji y lo dejó escapar.
-¿Qué haces? -dice Pedro.
-Pedro... ¿no lo recuerdas? -dice Pepe (el hombre).
-Eso pasó hace mucho. Ya es agua pasada.
-No, para mí no. ¡Mataste a mi mujer! -dijo Pepe enfadado.
-Oye, oye, tranquilo. Era una misión, nada más. Además, tu mujer era una terrorista, eso no lo olvides.
-Es verdad que era una terrorista, pero aun así te mataré. Al fin y al cabo era mi mujer, ¿no? Pagarás por todas las muertes que has causado, empezando por la de mi mujer.
¡PIUM!
-¡No, para! -dice Pedro, que segundos después cae al suelo desplomado.
Al oír los disparos, Benji pasó a la cocina preguntando:
-¿Qué has hecho?
-Lo mejor para todos. Esta gente no se merece esta desgracia, todo esto no podía haber acabado mal. Ahora, si no te importa, sería mejor que salieras de este sitio.
-¿Qué va a hacer? -dice Benji sorprendido.
-Algo que debería haber hecho hace mucho tiempo. Matarme.
-¿Por qué?
-Porque ahora, al aterrizar, seguramente me meterán entre rejas por cometer delitos con este hombre (señalando a Pedro), y me caerán más de veinte años de cárcel.
-No tiene porque hacer eso, yo lo ayudaré, se lo prometo. ¡¡¡NOO!!!
Pepe se quita la vida. Benji no sabe qué hacer y directamente sale de la cocina.
Ya en el aeropuerto, Benji le cuenta a Silvia lo ocurrido. Esther, va a ver cómo está Luis. Parece que está bien, y ella con valentía se acerca a él.
-¿Qué tal? -dice Esther.
-¡Ah! Hola. Bien -dice algo tímido Luis.
-¿Qué tal si vamos a tomarnos unas copas?
-Vale, estaría bien. ¿Se vienen los chicos?
-Claro. ¿Os venís o qué?
Entonces todos juntos se van a tomar unas copas, como si fueran una familia.

miércoles, 12 de junio de 2013

¡Qué libro más interesante estaba leyendo David! y sonrió orgulloso. Él nunca pensó que leer fuera como meterse en esa misma historia. Cuando él compró el libro, tenía apenas veinte hojas o tal vez menos, era como si cada día se escribiese algo nuevo o tal vez eso estuviera pasando en otro lugar.
Cuando iba a llegar al final del libro, algo le sorprendió. El final del libro estaba arrancado como si la historia acabara ahí y no hubiera más que contar.
David se acercó a su escritorio y resulta que allí estaba el final que le faltaba a su libro, pero las hojas estaban en blanco. No sabía cómo ni por qué el final estaba aparte de todo lo demás.
Al final del libro en el resumen de una de las tapas ponía "inventa tu propio final. Cada lector debe inventar el suyo".
David decidió ponerse a escribir un final que acabara bien y le parecierá bonito:
"Silvia, Esther, Benji y Luis regresaban a casa sanos y salvos. Ahora Esther y Silvia debían hacer hueco en la casa para ellos. Esther decidió decirle a Luis lo que sentía por él y fue tal casualidad que sentía lo mismo por ella.
Meses más tarde se hizo oficial que Esther y Luis iban a casarse. Nada ni nadie les iba a impedir su matrimonio. Pedro estaba encarcelado y ya nadie iba a impedirles aquello.
Entonces, empezó la ceremonia. Esther se dirigía al altar acompañada de su hija Silvia. Al llegar allí, Esther se puso al lado de Luis y el cura empezó a decir unas cuantas palabras.
-Estamos reunidos todos aquí para unir en matrimonio a Esther y a Luis. Bueno comenzemos...-dijo el cura.
-Silvia, trae los anillos-dijo rápidamente Esther.
-Aquí tienes-dijo contenta Silvia.
-Esther, ¿quieres a Luis como esposo?-dijo el cura.
-Sí, claramente sí-dijo Esther.
-Luis, ¿quieres a Esther como tu mujer?-dijo entusiasmado el cura.
-Sí, por supuesto-dijo Luis.
Entonces se casaron y después de aquello Esther y Luis se juraron su amor y que nadie en el mundo les iba a separar. Benji y Silvia empezaron a salir, se gustaron y decidieron que habían encontrado lo que los dos buscaban "algo raramente imposible de olvidar".
Este final fue hecho por David como cada uno debe hacer su final. Puede haber otros pero cada uno de ellos acabará bien como merece. Y como David eligió el suyo los demás lectores también deberán elegirlo.

lunes, 10 de junio de 2013

Dani continuaba leyendo el libro, ¡vaya finales! Parecía que cada uno lo escribía una persona diferente.
-¡Vamos a por el siguiente final!-dijo para sí emocionado. No sabía por qué pero le encantaba leer ese libro.
Luis y Benji consiguieron reducir a Pedro, antes de que este pudiera estrellar el avión. Rápidamente contactaron con la cabina central y les dieron instrucciones para poder aterrizar sin sufrir ningún daño más.
Los policías corrieron a apresar a Pedro, y lo trasladaron a la comisaría más cercana para tenerle vigilado hasta que saliera el juicio.
-Las mantendremos informadas de todo lo que nos cuente Pedro y sobre las fechas a las que tienen que acudir para declarar.-Dijo un policía dirigiéndose a Esther y a su hija.
-Muchas gracias, gracias por todo de verdad.-Respondió Esther.
Silvia fue rápidamente a abrazar a Benji.
-¡¡Benji!!-gritó Silvia emocionada.- ¡Qué miedo he pasado! Pensaba que te iba a perder.
-Me alegro de que no te haya pasado nada a ti. Pedro ya esta encerrado y no va a volver a hacernos daño a ninguno de nosotros. Eso te lo prometo.
Pasaron varios días, todo parecía normal. Benji y Silvia pasaban juntos todo el tiempo, mientras que Esther y Luis habían empezado una relación...
Antes de poder acabar el capítulo Dani se quedó dormido.
A las horas, se despertó sobresaltado. ¡Lo había soñado todo! Aún no había empezado a leer. Se propuso empezar a leer cuando su mujer le llamo:
-Cariño, ven a ayudarme por favor, ya acabarás de leer el libro más tarde.
-Vale cariño, ya voy.
Dejó el libro en la mesilla y mientras se dirigía a la cocina a ayudar a su mujer, iba imaginando cómo sería el siguiente capítulo. Estaba deseando que llegara la noche para meterse en la cama y empezar a leer. ¿Con qué le sorprendería esta vez? Por más que lo intentaba era imposible imaginarlo, había tantas opciones...

domingo, 9 de junio de 2013

Silvia despertó de golpe, estaba asustada. Había soñado con una historia que le contaron en su instituto sobre una chica que se había suicidado porque su  novio se había muerto por una enfermedad cancerígena  en el pulmón. A  pesar  del  apoyo  de sus  familiares y amigos, ella seguía llorando y entró en una depresión muy fuerte por la cual tuvo que ser hospitalizada en un centro psiquiátrico en el que la torturaban y maltrataban porque creían que estaba fingiendo su enfermedad  para poder quitarle dinero a la familia del novio ya que ella venía de una familia muy pobre. La  madre era alcohólica y el padre las abandonó cuando era ella pequeña .
A Benji lo conoció en una fiesta a la que la habían llevado sus amigas obligándola para que tuviera vida social ya que nunca salía de casa  y se pasaba todas las tardes estudiando. En la fiesta mientras sus amigas estaban bailando y divirtiéndose, ella se sentó en la barra sola. De pronto un chico que también estaba en la barra se acercó y empezaron a hablar y se pasaron toda la noche charlando hasta que se tuvieron que ir. Por la mañana se preguntaba quién sería ese chico misterioso que le había hablado. Al día siguiente fue al instituto y de repente oyó una voz que la llamaba. Se sorprendió porque era raro ya que no se hablaba con casi  nadie de su instituto. Se dio la vuelta  y era el chico que se había encontrado en el bar aquella noche. Se hicieron amigos en poco tiempo. Después de mucho tiempo de ser mejores amigos, un día él le dijo que  la quería  mucho y que si quería ser su novia. Ella aceptó, por supesto. Ese momento fue muy especial porque era su primer novio, siempre estaban juntos e iban a todos lados sin separarse.
Silvia no había soñado con eso. Simplemente se dirigía a visitar a Benji al hospital y contarle el sueño tan raro que había tenido con él.

jueves, 6 de junio de 2013



Luis fue el que dio el chivatazo. Él también estaba enamorado de Esther. Había estado vigilando los pasos de Pedro y sabía que quería secuestrar a Benji. Se sentía culpable de todo lo que le había pasado a Esther y quería evitarle un problema más.
Pedro cogió a Benji y lo utilizó como rehén con la policía. Allí estaban Esther y Silvia.
De repente todo se iluminó. Silvia se despertó. Se encontraba en su cuarto y llegaba tarde al instituto.
Se quedó viendo la tele hasta muy tarde.
Vio una serie policial, Dragon Ball y una película de la invasión de la tierra motivo por el que tuvo ese extraño sueño.
Eran las nueve de la mañana. Aún podía llegar al instituto y llegar a Lengua su clase preferida con Esther.
Una de las profesoras mas guapas y jóvenes del Domenico Scarlatti.
Silvia se quitó su sexy pijama y se vistió y preparó para ir a clase.
Se montó en su helicóptero privado y se marchó. Se sentó al lado de su compañero Benji y le pidió los deberes de Ciencias Naturales ya que nunca los hacía.
Al acabar la clase se encontró con el nuevo y extraño director. Se escondió en los baños ya que tenía que entregar tres partes. Al pasar un rato vio que ya era tarde. Al salir del baño se resbaló y se desnucó.

miércoles, 5 de junio de 2013


¡Qué interesante estaba el libro! Pensaba Dani. Llevaba más de un mes leyéndose ese libro, pero no lograba terminárselo. ¡Era como si cada día se añadiese un capítulo nuevo! El libro se llamaba Sombras del pasado y era el nuevo bettseller de Gonzalo Barnes. Era uno de esos libros que tienen varios finales y cada lector podía elegir cuál le gustaba más. Se acababa de terminar el primer final, y aunque no era lo que se había esperado no le había disgustado mucho. Después de dar de comer a su hija, se dispuso a comenzar a leer el segundo final. Decía así:
Se sentía culpable de todo lo que le había pasado a Esther y quería evitarle un problema más.
Pedro cogió a Benji y lo utilizó como rehén con la policía. Allí estaban Esther y Silvia.
El avión aterrizó y como si fuese una película, los policías fueron corriendo hacia el avión e intentaron abrir la puerta, pero nada, estaba cerrada a cal y canto. Se oyeron unas voces dentro del aeroplano. Parecía que había una discusión allí dentro.
Efectivamente. Luis había estallado de furia y se había abalanzado sobre Pedro. Él ya estaba harto de que los malos siempre se saliesen con la suya y no pagasen por todo lo que habían hecho. Así que le quitó la pistola al desprevenido Pedro y la tiró. Benji aprovechó para ir a la cabina y abrir las puertas. Todo el mundo empezó a salir corriendo del avión (Benji incluido). Allí dentro sólo quedaban Luis y el maniatado Pedro.
Los policías entraron al avión, esposaron a Pedro y a Luis (ya que no sabían quién era ni qué hacía allí) y los llevaron a la comisaría. Benji salió del avión y fue corriendo hacia donde estaban Silvia y su madre. Le dio un fuerte abrazo, de esos que no se olvidan nunca, y pensó que no se quería ir de su lado jamás. Ella era su media naranja, y por fin Benji lo había entendido.
Silvia sintió algo parecido, el corazón le empezó a latir fuertemente. Todo era genial, perfecto, un cuento como esos de los que las niñas sueñan de pequeñas. Todo iba bien hasta que apareció David García. Silvia y Benji seguían abrazados pero cuando Silvia lo vio, recordó todos esos años detrás de él, todos esos llantos, esas tardes enteras encerradas en su habitación. No. Esto no podía seguir así. Silvia se prometió a sí misma que acabaría sola, sin marido ni hijos, odiaba a los hombres desde que David empezó con otra. Habían estado durante un curso tonteando, parecía que al final iban a tener algo, todos los creían, pero entonces Silvia se enfadó con él porque estaba jugando a dos bandas, y David dejó a su novia y empezó a salir con otra en vez de con ella. Parecía que Silvia no existía ni había existido nunca. Por eso se prometió a sí misma que no le volvería a pasar. Pero no. Benji no era de esos, ella lo sabía, así que  desde ese momento Benji y Silvia pasaron el resto de su vida juntos y David se quedó solo. Sin Silvia ni la otra chica. Sin nadie . Eso le pasó por donjuan.

martes, 4 de junio de 2013

Benji había muerto. Encontraron sus cenizas dentro del avión destrozado, ya apagado por los bomberos.
Analizaron las cenizas y sí, eran las de Benji. Rápidamente se lo comunicaron a sus padres. Ambos se pusieron muy tristes; pero era la cruda realidad.
Pablo, que acababa de llegar de vacaciones, había estado en Londres visitando a unos primos que vivían allí y se dirigía a casa de Silvia.
Eran las once de la noche, al siguiente día no había colegio porque sería domingo. Así que Pablo decidió ir a visitarla. Iba andando tan tranquilo cuando vio una sombra por detrás y se paró. Se giró lentamente y vio el rostro de Benji.
-¿Eres tú Benji? -dijo el muchacho asustado.
- Sí, pero a la vez no.
-¿Cómo que sí pero a la vez no?
-Verás, soy el demonio reencarnado en Benji.
Mientras tanto en casa de Silvia cuando Luis terminó de contarles la historia, Silvia observó que su madre y Luis no se habían quitado el ojo uno a otro, así que decidió dar un paseo por la calle y dejarlos solos un rato.
Cuando salió fuera de su casa, vio a Pablo corriendo despavorido hacía ella.
-¿Pablo, eres tú? ¡Qué bien que estés ya aquí!
-Sí, soy yo, pero corre que viene el demonio reencarnado en Benji.
-¿Qué? -preguntó Silvia.
-Lo que oyes. Por cierto, ¿es eso verdad de que Vanessa ha muerto?.
-Sí -respondió ella.
-No puede ser- dijo llorando Pablo.
De repente algo les sorprendió por el cielo: era el demonio con el cuerpo de Benji.
-¡Benji!- gritó Silvia- ¿qué te ha pasado?.
El demonio rió a carcajadas.
-Vas a morir, Silvia. Por tu culpa Benji está muerto y ahora lo vas a pagar. Su alma es oscura. Pero ¿sabes lo mejor?
-¿Qué?- respondió Silvia.
-Que me he podido rencarnar en él gracias a que mató a dos niños en su antiguo instituto. Fue sin querer pero lo hizo. Gracias a eso yo me he podido meter en su cuerpo. Por cierto, ¿sabes por qué quería irse de aquí? Porque creía que Vanessa había muerto por su culpa.
Y entonces se abalanzó sobre ellos. De repente, apareció Goku. Se convirtió en un super saiyan de nivel 4 y acabó con ese demonio con una onda vital de nivel diez. De todas formas Pablo se había tirado para proteger a Silvia ya que el demonio se había abalanzado sobre ella.
Fue el momento en que ella lo vio claro: su amor era Pablo. Él había estado siempre cuidándola y el año pasado le confesó su amor. Así que Silvia le dio un beso en los labios y ambos se abrazaron.
Silvia estaba feliz porque había conseguido al chico que le gustaba de verdad, y Pedro y Benji (o mejor dicho el demonio) habían desaparecido de su vida.

lunes, 3 de junio de 2013

El avión acababa de aterrizar en el aeropuerto de Madrid-Barajas del cual el avión procedía.
Pedro había dado la orden a los pilotos de dar la vuelta y éstos al parecer le habían hecho caso.
Benji se intentaba soltar del fuerte y musculoso brazo de Pedro que le tenía agarrado del cuello.
Cuando salieron por el avión de la compañía Iberia, varios soldados de asalto y policías con sus coches se encontraban en el lugar.
Pedro dijo:
-Quiero un coche y un millón de euros. Dejaré a este muchacho en la puerta del Sol, sólo si dejan que me vaya de aquí ileso.
Benji no podía escapar. Esther y Silvia intentaron convencer a Pedro de que dejase a Benji en paz.
El pobre muchacho estaba muy asustado porque Pedro no dejaba de apuntarle con una pistola, pero entonces recordó que tenía que ser valiente para poder salir vivo y poder contarles a Esther y a Silvia la historia que le había narrado ese hombre tan extraño.
Así que antes de que alguien pudiera decir algo Benji armado de valor mordió la mano de Pedro y escapó.
Pedro sin pensárselo dos veces corrió hacia el avión y le pidió a gritos a todos los pasajeros que lo abandonaran. Todos huyeron asustados pero a la vez contentos porque por fin habían escapado.
Benji no pudo aguantar que ese hombre tan malo y peligroso se escapara así que decidió correr al avión.
Los soldados y los policías siguieron sus pasos pero nadie llegó a tiempo .
En el avión solo se encontraban Benji, Luis y Pedro. Los padres de Benji se econtraban en la pista.
Con mucha valentía el muchacho le dijo a Pedro:
-Cobarde, suelta la pistola.
Éste se rió a carcajadas y empezó a golpear al chico. Cuando terminó, rápidamente despegó.
Luis se levantó y empezó a estorbar a Pedro, Benji dijo:
-Luis, sal de aquí por favor. Yo le detendré. Tú  vete, salta antes de que estemos a demasiada altura. Tienes que contarles muchas cosas a Esther y a Silvia.
Su último gesto fue una sonrisa.
Luis saltó y cuando se encontraba en el suelo, vio cómo alguien saltaba del avión y luego éste se estrellaba contra el suelo produciendo una gran explosión, destrozando los cristales del aeropuerto.
Cuando los soldados, la policía y todas las personas restantes que había allí llegaron al lugar, se encontraron
con la persona que no querían ver.
Era Pedro. Rápidamente la policía esposó al maldito asesino y secuestrador. Entonces es cuando comprendieron que Benji había muerto.

jueves, 30 de mayo de 2013

Pedro tenía a todos aterrorizados y no paraba de buscar a Benji,  cada vez estaba más furioso y a la mínima golpeaba a la gente.
Mientras tanto, Benji permanecía escondido en la cocina y aquel extraño hombre le estaba contando por qué estaba haciendo todo eso Pedro.
Al parecer, cuando Esther y Pedro trabajaban en La bola de cristal se hizo una gran fiesta a la que todos los trabajadores del programa estaban invitados y a la que también asistirían importantes famosos como Alaska. Por aquel entonces, Pedro estaba metido en el mundo de las drogas como muchos de los trabajadores del programa y famosos. Él era el que les vendía droga. Esther sabía lo que él hacia y lo intentó convencer de que lo dejara, pero él ya estaba muy enganchado y cada vez se alejaba más y más de ella. Durante la fiesta hubo una redada por un chivatazo que dio alguno de los asistentes. Pedro pensó que el chivatazo lo dio Esther y en el momento en el que lo atraparon juró vengarse de ella.
-Y tú, ¿cómo sabes todo eso? ¿Quién eres?-preguntó Benji, atónito de lo que aquel extraño hombre le había contado.
-Yo...-dijo el hombre sin saber qué decir.
Tras una larga pausa en la que el hombre no quería hablar y Benji se enfadaba cada vez más.
-¡DÍMELO!-gritó Benji.
Justo en ese momento Pedro se percató de la presencia de Benji. Entró dentro de la cocina y le asestó un fuerte golpe en la cabeza a Luis que lo dejó tirado en el suelo e inconsciente.
Luis fue el que dio el chivatazo. Él también estaba enamorado de Esther. Había estado vigilando los pasos de Pedro y sabía que quería secuestrar a Benji. Se sentía culpable de todo lo que le había pasado a Esther y quería evitarle un problema más.
Pedro cogió a Benji y lo utilizó como rehén con la policía. Allí estaban Esther y Silvia.

miércoles, 29 de mayo de 2013

Ayer vi un perro abandonado por la calle. El perro buscaba a su amo. El perro no lo encontraba. Me dio mucha pena el pobre perro. Mucha gente pasaba al lado del perro y lo miraba con pena. Al final apareció un chico. El chico era el dueño del perro. El chico había buscado a su perro durante horas.
Ayer vi un perro abandonado por la calle. El animal [d1] buscaba a su amo.
Buscaba[d2]  a su amo.
Ayer vi un perro abandonado por la calle que[d3]  buscaba a su amo pero[d4]  no lo encontraba. Me dio mucha pena el pobre.[d5]  Me dio mucha pena. [d6] Me dio mucha pena el pobre animal.[d7]  Mucha gente pasaba a su[d8]  lado y lo miraba con pena. Al final apareció un chico. Él[d9]  era su dueño. Era[d10]  el dueño del perro. Al final apareció un chico que[d11]  era su dueño. Lo [d12] había estado [d13] buscando durante horas.


 [d1]Hiperónimo.
 [d2]Elipsis
 [d3]Pronombre relativo.
 [d4]Conector adversativo.
 [d5]Elipsis
 [d6]Elipsis.
 [d7]Hiperónimo.
 [d8]Sustitución por un determinante posesivo.
 [d9]Sustitución por un pronombre.
 [d10]Elipsis.
 [d11]Sustitución por un pronombre relativo.
 [d12]Sustitución por pronombre.
 [d13]Elipsis del sujeto.

lunes, 27 de mayo de 2013

Benji pasó al avión, tras haber pasado las maletas por el control del aeropuerto...Dentro del avión, Benji estaba un poco asustado por todo lo que pasó.
Pedro estaba en el avión para seguir a Benji y crearle un poco de miedo. Cuando el avión ya llevaba varias horas de vuelo, Pedro se levantó y grito:
-¡Qué nadie se mueva, esto es un atraco!
La gente estaba muy asustada. Benji, al verle, intentó escapar y llegó hasta el cuarto de baño para decírselo a Silvia y le dijo:
-Hola Silvia...-dijo susurrando.
-Hola Benji, ¿por qué hablas tan bajito?-dijo Silvia.
-Es tu padre, me ha seguido y ahora nos tiene de rehenes en el avión. Intenta llamar a la policía, por favor-dijo asustado.
-¿Qué? Enseguida aviso a la poli, tú mientras tanto intenta que no te pille y seguir en contacto conmigo. -Dijo Silvia aterrorizada.
Silvia se lo dijo a su madre y Esther llamó deprisa a la comisaria y lo comunicó.
La policía, rápidamente fue al aeropuerto. El comisario contactó con Pedro por el micro y le dijo:
-Pedro, ¡ríndete! y baja del avión.-Dijo el comisario.
-¡Jamás!-Dijo gritando.
A partir de ahí perdieron contacto con el avión, nadie sabía el porqué. Silvia estaba tan aterrada que lo único que hacía era llorar y llorar.
Pedro seguía amenazando a la gente y buscando a Benji. Él salió del baño para intentar llegar donde los pilotos pero al salir del baño se encontró a un hombre encapuchado que le dijo:
-Sígueme, sin chillar y sin asustarte sólo quiero ayudarte.
Benji sin decir nada le siguió y llegaron a la cocina donde ahí se refugiaron.
Pedro se puso histérico y empezó a sacar su furia contra los pasajeros.

miércoles, 22 de mayo de 2013

Cuando Esther volvió a abrir la puerta, Pedro ya no estaba. Había desaparecido como por arte de magia. Ella no sabía por qué pero si Pedro no la dejaba en paz, era por alguna razón. Entonces, Silvia apareció por la puerta.
-Hola, mamá, ¿qué pasa?-dijo Silvia preocupada.
-Creo que Pedro, tu padre, ha venido a llevarte con él y por ello está aquí-dijo Esther apenada.
-¿Por qué iba a querer llevarme con él?-dijo Silvia asustada.
-Porque eres su hija y sabe que si te lleva con él, será lo que más daño me haga. Él nunca aceptó que lo nuestro acabara y por ello quiere vengarse.
Esther pensaba irse pronto de aquella ciudad, no quería que nadie saliera herido. Minutos más tarde, llamaron a la puerta. Era Pedro otra vez. ¿Querría algo de Esther o simplemente decirle a ella y a su hija que no iba a volver a hacerles daño?
-Hola, Esther siento lo que os he hecho a ti y a tu hija, prometo no volver a molestarlas- dijo Pedro.
Antes de que Esther pudiera decir unas palabras, Pedro se dio a la fuga y no volvió a parecer más por allí. Ella no entendía el significado de aquellas palabras o por qué fue a decirles aquello.
En otro lugar andaba Benji por la calle paseando cuando, de repente, se encontró con Silvia. Un simple "hola" habría alegrado la conversación, pero no.
-Hola, Silvia deberías saber que mañana por la mañana vuelvo a mi país y ya no me volverás a ver por aquí-dijo Benji entristecido.
-¿Por qué te vas?, no lo entiendo.
-Aquí no tengo amigos y solo había venido algunos días para conocer otros sitios. Mira por dónde te conocí a ti y a tu madre, que por cierto es muy maja.
-Pero, me tienes a mí como amiga, eso es lo que importa,  ¿no?
-Sí, supongo. Pero nos volveremos a ver cuando vuelva aquí de vacaciones de verano.
-Bueno, pues solo deseo que te vaya bien hasta entonces y te cuides mucho.
Silvia le dio un beso en la mejilla a Benji. Él se puso en camino para irse a su país, con su familia.

martes, 21 de mayo de 2013

Lo policías les comunicaron la noticia de los extraterrestres a Silvia y a su madre. Ambas quedaron muy sorprendidas. "¡Eso es imposible!" Pensaron.
Una vez que los policías se habían marchado, Esther decidió que era el momento de contarle toda la verdad a Silvia. Esther la llamo:
-Silvia, hija. Ven al salón un momento, por favor.
Silvia se dirigió al salón.
-¿Qué quieres mamá?- preguntó Silvia. Aunque ella ya sabía sobre qué iban a hablar.
-Es hora de que sepas la verdad sobre tu padre, sobre tu pasado... Todo esto surgió en la famosa "movida de los 80" sobre la que habréis hablado en el instituto... Yo apenas tenía 20 años cuando entré a trabajar como presentadora de un famoso programa para niños, llamado La bola de cristal. Pedro trabajaba allí como cámara y guionista. Él como casi todos los que allí trabajaban se fijó en mí. A los pocos días yo también me fijé en él. Todo surgió demasiado deprisa...- continuaba contando Esther.
Mientras tanto en la comisaría Pedro y sus secuaces estaban siendo sometidos a un severo interrogatorio. Todos menos Pedro habían confesado, él no decía ni una palabra. Parecía estar mudo, ni una palabra, ni un sonido, nada. Un oficial de policía decidió entrar él solo a la sala de interrogatorios donde Pedro se encontraba, con el fin de que no se sintiera tan vigilado y comenzase a hablar. 
Pasaron horas, y Pedro seguía sin hablar. Llegó el cambio de turno, y Pedro lo aprovechó para pedir ir al baño. Un oficial lo acompañó hasta la puerta, luego salió fuera a esperar a que su compañero llegara para relevarle. Pedro aprovechó un descuido y ¡ZAS! Se abalanzó sobre el policía y lo introdujo en el servicio a la fuerza. Allí consiguió reducirlo dándole un golpe en la nuca. Rápidamente le quitó el traje y se lo puso él dejándole amordazado y atado con sus propias esposas. Salió lo más rápido que pudo, sin levantar sospecha alguna. Antes de salir, dio a la alarma de incendios para formar un poco de caos y no dar ocasión por el momento de que algún otro oficial fuera al baño.
Pedro se dirigió a casa de Esther. Al llegar, observó por la ventana cómo madre e hija conversaban en el salón. Sin pensárselo dos veces cortó la línea telefónica y acto seguido llamó al timbre. Pedro miró al suelo. Como ya conocía bastante a Esther, sabía que ella siempre miraba antes de abrir la puerta. Esther despreocupada miró por la mirilla y al ver que era un policía abrió la puerta. Pedro fue rápido y antes de que Esther pudiera decir nada la roció con un spray de pimienta y cerró la puerta.

lunes, 20 de mayo de 2013

Aquellos alienígenas era los que siempre habían cuidado de ella. Querían ver hasta dónde llegaba la crueldad de las personas y aquel amor incondicional de una madre. Silvia siempre había creído que eran producto de su imaginación y que eran como sus ángeles de la guarda. En este caso no intentaron intervenir puesto que ellos, como muchos otros más, observaban al ser humano: su forma de actuar, de pensar, su gran curiosidad del saber y, sobre todo, su forma de amar y de odiar a los demás. Es lo que más le sorprendia a estos seres. Y aunque habían tenido oportinidad de eliminar el planeta, siempre encontraban a alguien con tan hermoso corazón que se arrepentían de hacerlo. Y en este caso, aquel corazón era el de Silvia .

domingo, 19 de mayo de 2013

      Los secuestradores echaron a correr dispersados por todas partes. Se escuchaba el estruendo de puertas de coches cerrándose y el jefe de la patrulla dando órdenes. Mientras tanto Benji y Saúl desataron a Esther y Silvia y sin dirijirse apenas unas palabras salieron todos a toda prisa de la nave.
      Los polícias les vieron saliendo desde la puerta lateral de la nave y fueron en su ayuda. Les dieron mantas e intentaron curar sus pocas heridas. Después volvieron a sus puestos.
Los secuestradores, incluido Pedro, ya se habían alejado de la nave.
      Al darse cuenta, los policías encendieron sus sirenas y fueron en su búsqueda. Otro coche patrulla llevó a Silvia y a los demás a un lugar seguro.
-Esto ya es cosa nuestra.-dijo el policía- no hace falta que intervengan más en este caso.Cuando atrapemos a los secuestradores, les llamaremos y los llevaremos a los juzgados.
Esther estaba tan asustada que solo pudo decir "gracias".
      Los fujitivos iban camino al aeropuerto en su furgoneta. Los polícias les pisaban los talones. Habían colocado un chip rastreador en su vehículo y sabían perfectamente a dónde se dirigían los secuestradores.
      Su furgón iba a 180 por la carretera conduciendo por el otro carril en direccion contraria, esquivando con gran dificultad los coches y llevándose algún perro por delante.
      Los polícias no podían alcanzarles por su temeraria conducción así que llamaron a todas las unidades.
      Pedro y los demás secuestradores estaban pensando en saltar de la furgoneta al río Tajo ya que eran nadadores profesionales con medallas de oro pero a 180 kilómetros les era complicado.
      De repente, un meteorito cayó del cielo dejándoles a todos cegados. ¡Eran extraterrestres! La nave se acercó a la furgoneta y lanzó un rayo verde contra ellos. La furgoneta parecía estar vacía ya qe empezó a ir hacia cualquier dirección perdiendo el control. Se estrelló en un árbol, y los polis, sorprendidos al ver coche vacío, volvieron a la comisaria.
      Al llegar no cabían en su asombro: ¡Los secuestradores estaban atrapados y atados en el suelo!

jueves, 16 de mayo de 2013

Saúl ya había llegado a su casa. Se había llevado un sofocón en la comisaría . ¡Casi lo descubren! Iván se había quedado allí pero a él le habían dejado irse.
Mientras, en la nave Esther se encontraba al lado de su hija en una habitación aislada. Silvia estaba atada y con los ojos vendados. En cambio su madre sólo tenía las manos atadas. Se levantó y empezó a hablar a su hija.
-Cariño, soy yo -dijo Esther.
-Mamá, ¡ayúdame! -gritó Silvia desesperada.
-Tranquila, amor, no nos van a hacer nada. Tengo algo que contarte -siguió su madre.
-Bueno, pero sácame de aquí y cuéntamelo en casa.
.Hija...El hombre que te ha secuestrado es tu padre. Debí habértelo dicho, lo sé, pero no sabía cómo.
Silvia se quedó perpleja, no sabía qué decir, simplemente se echó a llorar...
En ese momento entró Benji a la nave. Estaba furioso y, cuando pasó y vio a los cuatro secuestradores y a Pedro hablando, empezó a chillarles, a preguntarles que dónde estaba Silvia, que qué le habían hecho, que la soltasen. Entonces llegó Iván. Vio el panorama y sin seguir ninguna de las instrucciones que seguramente tenían, cogió a Benji por detrás y lo tiró al suelo. Le empezó a pegar y cuando estaba apunto de dejarle en coma apareció Saúl.  No dudó ni un segundo en abalanzarse sobre él y quitarle de encima de Benji. Los cuatro secuestradores estaban parados sin saber muy bien qué hacer. Entonces sonaron sirenas de policía y excepto Pedro e Iván los demás salieron corriendo. Se quedaron en la habitación Benji , Saúl , Iván y Pedro, además de Silvia y Esther que estaban en la habitación aislada de al lado.
Saúl le dijo a Benji que saliera corriendo por una puerta secreta que sólo él conocía y aprovechando que entonces sonó una patrulla de policía y todos se quisieron esconder, salió corriendo todo lo rápido que pudo (contando que su pierna estaba mal) y consiguió escapar. A través de todos esos pasadizos, llegó a la habitación donde estaban Silvia y Esther.



lunes, 13 de mayo de 2013

Los hombres de Pedro salieron en busca de Esther. Rápidamente la alcanzaron. La ataron en una silla con los ojos vendados y la amordazaron. Cuando le retiraron la venda de los ojos, se dio cuenta de que a su lado estaba su hija y Pedro se encontraba allí también.
Mientras tanto, Benji se arrancó un trozo de camisa para intentar taponar la brecha de la cabeza de Vanessa. Benji quedó asombrado cuando Vanessa clavó dos piedras en el hoyo del barranco y empezó a escalar. Benji siguió sus pasos y en poco tiempo se encontraban fuera del barranco.
-Vanessa, ¿eres tú, verdad?-dijo Benji.
-Sí....dejamé por favor -respondió Vanessa.
Esta salió corriendo hacia la carretera. Benji no dudó en seguirla.
De repente, algo extraño ocurrió en décimas de segundo. Un ruido de un frenazo de camión orientó a Benji hacía el lugar. Cuando llegó a la carretera, se encontró con la ingrata sorpresa del cuerpo moribundo de Vanessa. Mientras se acercaba, observó sus heridas. Tenía una pierna rota, la cara destrozada y se le veía el músculo en el brazo derecho y la brecha de la cabeza se había hecho más grande.
Sus últimas palabras antes de morir fueron para Benji.
-Benji, no dejes que se lleven a Silvia, se la llevarán en un barco negro de rayas blancas...
mañana por la mañana. Es mi último deseo antes de morir.
El camionero se dio a la fuga.
Benji gritó desesperado y lloró hasta no poder más pero de repente recordó a Silvia y salió corriendo hacia la nave.
El jefe de policía ordenó a sus hombres que entraran a la nave a buscar a Silvia, sin saber que Esther se encontraba allí.
David, Marcos y Manuel entraron en la nave seguidos de el jefe de policía que se llamaba Antonio. Los policías iban cubriendo todos los ángulos para no ser sorprendidos en un tiroteo. De repente, David entró en una de las habitaciones que había allí. La puerta se cerró y la habitación comenzó a arder.
Todos intentaron abrir la puerta pero era inútil: estaba bloqueada. Después de dos eternos minutos, la puerta se abrió pero solo estaban las cenizas de David.




martes, 7 de mayo de 2013

Benji seguía intentando salvarse, pero cada vez tenía menos fuerzas y menos esperanzas de ser rescatado. Le dolía mucho la pierna y eso hacía más difícil salir del barranco en el que estaba.
Mientras tanto, Esther,el inspector y la patrulla seguían espiando los movientos de la vieja nave.
Idearon un plan para acorralarlos, pero el inspector no quería que Esther participara. Aunque a ella le daba igual su opinión lo único que quería era salvar a su hija.
Mientras el inspector explicaba la estrategia a los demás policías, Esther se escabulló para buscar a su hija en la nave. Estaba muy nerviosa, se adentraba cada vez más y más hasta que escuchó la voz de Pedro. No sabía qué pensar, no podía odiarlo porque fue el amor de su vida y el padre de Silvia, pero lo que había hecho no le gustaba nada.
Vanessa regresó de la ciudad, estaba muy triste. De camino a su casa pasó por el bosque y pensó en las cosas que había hecho. Había traicionado a su amiga aunque era para salvarse, pero lo que había hecho no tenía nombre: no sólo la había traicionado sino que también le había mutilado un brazo a una joven inerte. Se sentó debajo de un árbol y empezó a llorar desconsoladamente y pasaron algunas horas hasta que se tranquilizó. La noche ya había caído, se levantó.  De camino a su casa escuchó los gritos de un chico. Se asomó por el barranco y vio una figura pero no reconoció su cara porque era de noche y todo estaba oscuro. Fue en busca de algo para ayudarlo. Cerca de allí encontró una vieja cuerda, se la ató a la cintura y el otro extremo lo ató a un árbol. Bajó el barranco como pudo y cuando estaba a punto de llegar junto a Benji la cuerda se rompió y cayó sobre una roca. Se dio cuenta de que sangraba por la cabeza y estaba mareándose. Benji se acercó a ella como pudo, no sabía qué hacer. Estaba muy fría y apenas respiraba. Estaba desesperado.
En ese mismo instante, en la nave, Esther hizo un mal movimiento y Pedro se dio cuenta de su presencia y mandó a sus amigos a atraparla.

lunes, 29 de abril de 2013

 De camino a casa Benji pasó por al lado de un bosque. Pedro y el resto salieron de la habitación y se subieron a una furgoneta negra. Benji vio salir a la furgoneta del bosque y cuando ya no se los veía, entró al bosque en busca de Silvia. Al llegar a la nave vieja, se asomó a todas las ventanas y en una de ellas la vio atada y con los ojos vendados. Salió corriendo a decírselo a Esther, pero tropezó con una piedra y se cayó por un barranco.
-¡Socorrooo!-gritó desesperadamente. Pero nadie lo escuchó.
Mientras tanto, Esther estaba en la comisaría entregando la pulsera que encontró Benji.
-Señor, hemos encontrado esta pulsera, ¿nos servirá para algo?-dijo Esther. 
-Por supuesto-dijo el oficial de policía.
-Nos servirá para rastrearlos y encontrarla, el caso es encontrar a la muchacha viva-dijo dudoso.
La pulsera fue llevada al laboratorio para saber de quién era ya que Esther no quería decir de quién era.
-Es de Pedro-dijo la científica.
Y fueron en busca de él.
La furgoneta negra se dirigió a un tanatorio para provocar miedo a la familia de Silvia. Entraron al tanatorio encapuchados y se dirigieron a una sala donde estaba el cuerpo inerte de una muchacha jovencita. La cogieron y se fueron a la cabaña con mucha velocidad. Al llegar, empezaron a idear su plan.
-Tenemos que hacer lo posible para que no nos descubran -dijo Pedro.
Vanessa trabaja junto con Pedro para ser libre ya que ella también estaba secuestrada.
Pedro cogió a Vanessa y le dijo con mucha voluntad.
-Coge a la muerta, también el serrucho y córtale el brazo y envíaselo a la madre-dijo con voz no muy alta.
-Vale...-contestó con un poco de asco.
Y así lo hízo. Luego se fue por un atajo que conocía que llega directamente a la ciudad y lo entregó a los carteros.
Los policías fueron al tanatorio para investigar el secuestro de la dicha difunta. Mientras tanto Benji se iba arrastrando poco a poco para poder salvar su vida.
Esther y el comisario junto con una patrulla encontraron la nave vieja pero no se atrevían a entrar por lo que pudiera pasar.

domingo, 28 de abril de 2013

Esther le dijo que ellos se solían reunir en una vieja nave abandonada. La policía fue corriendo al lugar donde le había dicho Esther, pero allí no había nadie, sólo un montón de carpetas con información de Silvia, dónde vivía, con quién se juntaba, etc...
Benji seguía muy preocupado e intentó investigar por su cuenta. Primero se fue al lugar del secuestro y allí encontró una pulsera. "Debia de ser de uno de los secuestradores", pensó. Benji la cogió y se dio cuenta de que tenía un símbolo muy raro,como una especie de estrella. Salió corriendo a la casa de Esther a ver si sabía algo. En cuanto llegó, llamó a la puerta.
-¡Hola!-dijo Benji
-Hola, entra que hace frío-
-Mira lo que he encontrado-Benji le enseñó la pulsera.
Esther la reconoció al momento, era la pulsera de Pedro.
-¿Dónde la has encontrado?-dijo Esther.
-En el lugar donde secuestraron a Silivia ¿te suena?
-No, déjamela que se la enseñe al comisario a ver qué dice.
-Vale, mañana me cuentas que me tengo que ir.
Al mismo tiempo, en la otra punta de Aranjuez estaba Silvia atada, con los ojos vendados, en un sitio oscuro y silencioso. De repente le quitaron la venda de los ojos y vio que había tres hombres enmascarados. Uno de ellos llevaba la cara al descubierto, era Pedro. Silvia lo reconoció al momento. Ella no sabía qué hacer. Se quedó callada. En ese momento apareció entre las sombras un hombre bien vestido, corpulento, que se llamaba Sam por lo que pudo oír Silvia. Cuchicheó con Pedro. Pero Silvia no se enteraba de nada y de repente, le volvieron a poner la venda en los ojos y salieron todos de la habitación.

jueves, 25 de abril de 2013

Esther estaba muy nerviosa, sabía que las cosas no iban a ir a mejor. Esther y el profesor de Naturales habían mantenido una relación en secreto en su juventud, de ahí surgió Silvia. Se la llevaron a un orfanato para que no hubiera problemas. Ella aún no lo sabe, pero Esther y Pedro (el profesor de Naturales) son sus verdaderos padres. Esther cree que los otros tres secuestradores eran muy amigos de Pedro en el instituto.
Llaman a la puerta. ¡Es Benji! 
-Hola Esther, ¿cómo estás? ¿Has averiguado algo?
-Después de lo ocurrido, no muy bien. Aún no me han llamado, pero estoy segura de que la encontrarán.
-Eso espero -dijo Benji. Esther le dio de merendar y Benji se fue a su casa.
Por el camino vio a Saúl, y rápidamente se escondió detrás de un árbol. Saúl iba acompañado de un hombre mayor. A Benji le parecía haberlo visto antes, cree que es uno de los secuestradores. Les siguió hasta que pararon delante de un desguace. Se quedaron un buen rato ahí quietos, parecía que estaban esperando a alguien y Benji decidió llamar a la policía. De repente, llegó una patrulla en un santiamén. Saúl y el otro hombre miraron asustados a su alrededor y vieron a la policía e intentaron salir huyendo, pero les cogieron rápido. 
Benji llegó contento a su casa porque creía que había hecho bien por avisarlos.
Ya en la comisaria, interrogaron a Saúl y a Iván (el otro hombre) pero no les sacaron mucho. Cuando la policía llamó a Esther y le dijeron que el otro hombre se llamaba Iván, ella les dijo que es buen amigo de Pedro, el profesor de Naturales del instituto Domenico Scarlatti. Ya de paso les contó su pequeña relación con él.
Los policías fueron a casa de Pedro pero vieron que no había nada. ¡Parece que Pedro se ha escapado!
Preguntaron a Esther si sabía si Pedro tenía un sitio secreto o algo parecido. Ella le confesó que sí, donde ellos se reunían. 

martes, 23 de abril de 2013

Su móvil había quedado sin batería. Entonces, fue a buscar a alguien que le pudiera ayudar. Llegó a la comisaría y le explicó al policía lo que había ocurrido.
-Disculpe, señor policía, ¿podría ayudarme? Es sobre mi amiga: cuatro hombres la han secuestrado y ahora no sé dónde está -dijo preocupado Benji.
-Tranquilo, joven, trataremos de ayudarle. Cuéntenos. ¿Apuntó la matricula? ¿Vio la cara de alguno de ellos? -habló rápidamente el policía.
-Creo que me acuerdo de algo de aquello: tres eran bajitos y uno era algo más alto y no llevaba ninguna máscara.
-¿Sabe decirnos quién era?
-No, pero me resultaba familiar. Tenía un tatuaje en el hombro de un escorpión, como el que tiene mi profesor de Naturales -dijo sospechosamente Benji.
-Creo que le conocemos. Escapó de la cárcel hace mucho tiempo y estamos buscándolo todavía...-dijo impresionado el policia. Gracias por tu información. Te prometemos que encontraremos a tu amiga.
-Gracias, les dejo mi número de teléfono por si averiguan algo para que me avisen.
Benji se paró a pensar "pero, ¿por qué querría un profesor secuestrar a una alumna?" No le veía sentido alguno. Entonces, fue a avisar a la madre de Silvia.
-Hola, señora, quisiera decirle que voy a clase de su hija y su hija ha des...-dijo nervioso Benji.
-Hola, mi hija ha ¿qué?-dijo intrigada Esther, la madre de Silvia.
-Señora, su hija ha desaparecido. Cuatro hombres encapuchados la han secuestrado y no sé dónde la han llevado. Pero esté tranquila que los policias están buscándola -dijo con tristeza Benji.
-Pero, pero...-dijo Esther poco antes de desmayarse.
Rato despúes Esther reaccionó y se dio cuenta de que ella también tenía que ir a averiguar dónde estaba su hija. Resulta que ella sabía que aquel hombre que había secuestrado a Silvia no era de fiar. Benji estaba preocupado: "¿y si no volvía a ver más a Silvia? y ¿si quién la ha secuestrado no deja que Silvia vuelva con su familia?"

lunes, 22 de abril de 2013

Benji quedó tirado en el suelo sangrando, no sabía bien de dónde le venía la sangre, ya que estaba bastante aturdido por el golpe.
Instantes más tarde Silvia apareció doblando la esquina. Al verlo allí tirado, corrió hacia él.
-¿¡QUÉ TE HA PASADO!?-preguntó Silvia aterrada.
-No..No lo sé...No estoy seguro...-respondió con dificultad Benji.
De repente, todo sucedió muy rápido, no le dio tiempo a contestar a Silvia cuando cuatro hombres encapuchados bajaron de una furgoneta negra con los cristales tintados. Cogieron a Silvia y la metieron dentro. Benji, aterrado no sabía qué hacer, y no estaba seguro de lo que había pasado. Salió corriendo en busca de ayuda, empezó a correr de un lado a otro, pero al ser nuevo en la ciudad, no conocía aquel lugar. Estaba perdido por calles, que para él todas eran iguales. Tras correr durante lo menos veinte minutos, se acordó de que tenía el móvil en el bolsillo. Sin tardar un segundo, llamo a la policía.
-SOCORRO, SOCORRO, ¡POLICÍA! UNOS HOMBRES ENCAPUCHADOS SE HAN LLEVADO A MI AMIGA, POR FAVOR ¡AYUDA!, ESTOY PERDIDO. ¡SOCORRO, SOCORRO!-dijo Benji rapidísimo.
-Cálmate joven, cuéntame qué ha pasado, pero despacio no te pongas nervioso -respondió el oficial de policía.
-Han secuestrado a mi amiga, señor, cuatro hombres encapuchados han bajado de una furgoneta negra y se la han llevado-dijo Benji intentando calmarse.
-¿En qué calle ha sucedido? ¿Dónde te encuentras?
-No lo sé, señor, soy nuevo en la ciudad, aún no la conozco, estoy perdido-dijo Benji con tristeza. Antes de que se la llevaran, me dieron una paliza y estoy sangrando, no sé de dónde, pero sangro mucho, y me estoy empezando a marear...
-No cuelgue joven, estamos intentando localizar su posici...
Pero antes de que pudiese acabar la frase, la llamada se colgó. 

jueves, 18 de abril de 2013

Después de presentar a sus amigos, Silvia y Benji se quedaron a solas, o al menos eso pensaban ellos. Saúl se quedó celoso espiándolos detrás de un árbol. No conseguía escuchar lo que hablaban pero sí los veía. Silvia estaba intentando impresionar a Benji tocando la guitarra aunque él no le prestaba mucha atención. Benji miró el reloj, se levantó del banco y le dijo algo a Silvia. Se tenía que ir, dedujo Saúl. Se acercó al banco tímidamente y dijo:
-Hola.
 -¿Quién eres? -le contestó Silvia asustada.
-Me llamo Saúl, siempre hemos ido a las mismas clases. 
-Lo siento, no me había dado cuenta.
-¿Quién era ese chico?
-¡¿Me estabas espiando?! -preguntó Silvia extrañada.
-No, que va, pasaba por aquí y lo vi irse -dijo Saúl alertado.
-Ah, vale. Pues es un nuevo compañero de clase, ¿a que está bueno ?
-¿Te gusta?
-Bueno...él no se ha fijado aún en mí.
-Pues pasa de él. La verdad es que tú a mí...
-¿Qué? -preguntó Silvia.
-Que tu a mí... me... me tengo que ir ya nos veremos.
Saúl cogió su mochila que había dejado bajo el banco y se fue apresuradamente.
Al recorrer una manzana vio a Benji y se volvió loco de celos. Se acercó corriendo a él y empezó a pegarle sin pensárselo dos veces. Lo tiró al suelo y se fue corriendo.
Foto

miércoles, 17 de abril de 2013

¡Madre mía, qué nervios! Pensaba Silvia todo el rato. Por fin le había llegado su turno para hacerse la foto después de una larga espera en la cola. El fotógrafo no paraba de decirle "Ponte así , y ahora así , no no , así no". Silvia se estaba desesperando cuando por fin el fotógrafo le hizo la maldita foto...
El resto del día transcurrió normal, sin nada nuevo, bueno, no exactamente. Sí que hubo algo diferente: ha llegado un chico nuevo, se llama Benji y para Silvia era bastante mono y parecía muy simpático. Cuando terminaron las clases, en la salida, Silvia vio a Benji y decidió acercarse al chico.
-¡Hola!-le dijo Silvia.
-Hola...-contestó el pobre chico un poco tímido.
-Me llamo Silvia y voy a tu clase. No sé si me habrás visto antes pero estoy junto a ti en ciencias -dijo muy animada pensando que estaba haciendo buenas migas con Benji.
-Sí...sí te he visto, también estás cerca de mí en Naturales, ¿no? -preguntó Benji intentando parecer simpático.
-Sí, detrás de ti -respondió sonriente. ¿Estás solo?, ¿no conoces a nadie? -preguntó intrigada.
-Sí , bueno todavía es el primer día y no conozco a nadie pero estoy seguro de que con el paso del tiem...
Intentaba decir Benji cuando de repente Silvia tiró de su brazo gritando un "genial" que le asustó y le llevo donde estaban todos los demás chicos de su clase.
A la mayoría de sus compañeros, Benji les cayó bien. A todos menos a Saúl, que estaba enamorado de Silvia y no le había hecho ni pizca de gracia que sólo se conociesen de un día y ya hablase con ella cuando él la conocía de toda la vida y nunca había sido capaz de decirle un simple "hola".
Silvia salió a la calle y estaba nerviosísima por ver a su amiga Vanessa, una chica un poco guapa de cara pero un poco ancha de caderas.
-Hola ¿qué tal, Vanessa?
-Bien, ¿ y tú ? -contestó Vanessa.
-Yo también bien.
Y ambas sonrieron.
-Bueno, -dijo Vanessa- estoy un poco nerviosa.
-Yo también -dijo Silvia sin desconfianza.
Pablo salió de la nada y dijo:
-Tranquilas, sólo es una foto.
-Sí, pero es una foto en la que te verán nuestros amigos, los hijos de nuestros amigos, etc...
-¿Y si salgo mal? -preguntó Vanessa.
-Tranquilas, vosotras sonreíd, que lo demás os saldrá solo, ya veréis -contestó con confianza Pablo. 
Al llegar al instituto, se metieron en la clase donde estaban haciendo la fotos. De repente, por sorpresa Silvia vio a David García un chico que siempre le había gustado, pero según Silvia, él nunca se había fijado en ella.
Cada vez se iban más personas de la cola y cuando Silvia se dio cuenta, ella era la siguiente para la foto.

viernes, 12 de abril de 2013

Cuando Silvia despertó aquella mañana, no sabía que iba a ser el último día que desayunara en casa. Sonó el despertador a las siete y media como cada lunes. Desperezándose recordó que tenía que vestirse mucho más arreglada que de costumbre porque hoy se hacían las fotos de la orla. Peinó su pelo rubio oscuro y bastante ensortijado como pudo. La falda que se compró para la comunión de su primo le venía demasiado grande. Las medias tenían una carrera que disimuló con un poco de laca de uñas. Y los tacones negros parecían sacados del baúl de los recuerdos. No era su mejor conjunto pero no disponía de más recursos así que hizo un ademán frente al espejo de indiferencia y salió decidida a comerse el mundo esa mañana.
En la cocina la esperaba su madre, siempre bien vestida, siempre bien peinada, siempre con el maquillaje perfecto. "¿A qué hora se levantará?" -pensó Silvia. Sus relaciones no pasaban por su mejor momento así que un "Buenos días" discreto fueron todas las presentaciones matutinas que se hicieron. Tras tomar un poco de fruta y algo de leche, cogió sus cosas y salió de casa con la decisión de que hoy fuera aquel día que tanto había deseado.

lunes, 8 de abril de 2013

Querido blog:
  1. Pasa a pasiva refleja estas oraciones activas. Señala el sujeto en ambos casos.
    • Los delegados aceptaron las propuestas.
    • Finalmente el ayuntamiento construyó las casas.
    • Los médicos ignoran las causas.
    • La editorial publicó sus poemas.
    • Los alumnos entregaron las composiciones poéticas.
    • El mecánico reparó el coche.
    • Mi abuelo vende biciletas usadas.
  2. Distingue entre oraciones impersonales y pasivas reflejas.
    • Se come bien en ese restaurante
    • Se aprende a andar antes de correr
    • Se piensa que el español es fácil de aprender.
    • Aquí se hacen muebles baratos.
    • Se atendió a todo el que lo pidió.
    • Se avisó al médico inmediatamente.
    • Se busca a un alumno capaz de eso.
    • Se hablaba de fútbol.
    • Se venden pisos muy baratos allí.
    • No se cocinó más a partir de las once.
    • Se distribuyó a los enfermos las medicinas.
    • Se dormía a pierna suelta.
    • Se recurría a artimañas para ganar.
    • Se busca camareros para atender el bar.
    • Con esta compañía se vuela más barato.
    • En esa clase se aprendió la lección.

lunes, 1 de abril de 2013

Querido blog:
¡Buenas tardes blog! Hace mucho que nadie se pasa por aquí para poner una entrada ¿verdad?.
Bueno yo solo quería recordar que mañana tenemos que llevar el libro de Teatro Breve a clase, y también las hojas con el trabajo que nos mandó Esther, la profesora. El libro es este: 


El trabajo lo podemos encontrar en la página del instituto, en el apartado de "Lengua y Literatura" en la sección de "¡Ábrete libro!". Aunque por si tenéis algún problema, yo os lo dejo aquí:


§  Cartas de amor a Mary –José Luis Alonso de Santos

a)      Estamos en guerra. Los soldados Mac y Joe mantienen una conversación final en un entorno del cual apenas se habla. Por la situación en la que se encuentran. ¿Cómo crees que es? Imagínalo y descríbelo.

b)      Mac parece estar algo desmoralizado y triste, ¿de qué se queja?, ¿qué cosas le han sucedido para sentirse así?

c)       Mac se siente algo afligido. Para él sería mucho más llevadera la guerra si su mujer y familia estuvieran cerca. ¿Crees que con esto está criticando al absurdo de la guerra o simplemente no se ha parado a pensar?

d)      ¿Cómo es la actitud de Joe  respecto a la situación que padecen estos dos soldados?

e)      En el momento en que trascurre la conversación entre los dos soldados, Joe se percata de que Mac está herido. ¿Cómo es la reacción de Joe? ¿Mediante qué signo lo sabemos?

f)       En una situación donde una persona está herida lo más común hubiera sido llamar a la asistencia sanitaria. Sin embargo, Joe no lo hace. ¿Por qué?

g)      En la carta que Mac redacta a Joe, se mencionan los sueños que nunca podrá realizar con Mary. ¿Cuáles son?, ¿qué intenta mostrarle a Mary con esta carta?

h)      ¿Qué crees que ha querido simbolizar el autor al darle muerte a Mac antes de que Joe pueda apuntar su dirección para así hacer llegar a Mary la carta?


§  La consulta – Ángel Camacho

a)      Para comenzar en esta obra, se hace una breve descripción de la consulta, ¿cómo es esta?, ¿qué hay en ella?

b)      A continuación, el autor describe a Doña Encarnita.¿Cómo es ella? ¿Qué rasgos la caracterizan?

c)       Al principio de entablar la conversación, se aprecia la cordialidad mutua entre los dos personajes, pero según va trascurriendo la obra, ¿qué sucede?

d)      Doña Encarnita, para ganarse la aprobación del joven le halaga, pero poco a poco empieza a hacerle preguntas más personales. ¿Cómo reacciona el joven?

e)      ¿Qué ejemplo pone en comparación Doña Encarnita al joven para hablarle de su ‘’posible’’ enfermedad?

f)       ¿Por qué crees que el joven empieza a sentir todos los síntomas que Doña Encarnita le cita?

g)      ¿Cómo es la conversación? En la conversación abundan signos lingüísticos como puntos suspensivos, exclamaciones e interrogaciones. ¿Qué quieren indicar?

h)      En el trascurso de la conversación hay un momento de tensión entre los dos personajes. ¿Cuál es? Explícalo.

i)        Explica como termina la obra.


§  Epitafio- Jorge Díaz

a)      En un puente se hallan dos personajes que están ahí por el mismo motivo, ¿Cuál es?

b)      Uno admite ser un suicida reincidente ¿Cómo reacciona el otro? ¿Qué hacen para poder hundirse en el río?

c)       En el momento de cometer el acto. ¿Qué sucede? ¿Por qué de repente se vuelven tan cordiales?

d)      Los dos personajes van alargando el momento puesto que ‘’no tienen prisa’’ y empiezan a proponer lo que les apetecería hacer en ese momento. ¿Qué es?

e)      Excusas como que “ya es muy tarde para tirarse por el puente” o pararse a pensar  en la elaboración de su epitafio nos hacen pensar que los dos personajes se están arrepintiendo. De ser así, ¿qué les hace cambiar de opinión?

f)       ¿Cómo se sienten los personajes al final?


II.                  VOCABULARIO

Cartas de amor a Mary

. Los personajes parecen provenir del mundo anglosajón. Demuéstralo señalando al menos diez anglicismos del texto.

La consulta

Localiza más de cinco palabras relacionadas con el campo semántico de la medicina.

Epitafio

Busca en un el significado que tienen en el texto las siguientes palabras:

Epitafio, balaustrada, pudor, disuadirme, reincidente y ecologista

III.                GÉNERO DRAMÁTICO

Después de ver  los siguientes videos responde a las cuestiones:

Cartas de amor a Mary


La consulta


Epitafio


a)      Indica un acierto y un desacierto de cada una de las representaciones.

b)      ¿En qué ayuda ver una obra representada después de leída?

c)       ¿Qué es una acotación? ¿Qué función tienen?

IV.                EJERCICIOS DE EXPRESIÓN ESCRITA

1.       La obra Cartas de amor a Mary termina contiene en sus momentos finales una carta. Relee esa parte de la obra (pp.16-17) y redacta tú una en la que te despidas de tus seres queridos antes de morir.

2.       En la segunda obra se describe una consulta, ¿cómo te gustaría a ti que fuese la de tu médico?

3.       Si tuvieses que redactar un epitafio para la lápida de tu tumba, ¿cuál sería?, ¿qué querrías transmitir con él? 

V.                  EJERCICIOS DE EXPRESIÓN ORAL
Haz una lectura dramatizada en clase de una de las obras siguiendo las instrucciones del profesor.

VI.                INVESTIGACIÓN
Traza una breve semblanza en forma de entrevista de la vida y obra de José Luis Alonso de Santos.

VII.              VALORACIÓN
Redacta de manera argumentada tu opinión sobre la obra siguiendo el siguiente esquema

TESIS:

ARGUMENTOS:
1.
2.
3.
4
CONCLUSIÓN:



Pues nada más compañeros,¡Nos vemos mañana en clase!